El exfutbolista Mauricio Pinilla abrió su corazón en una sincera conversación con Pamela Díaz para su programa de YouTube Sin Editar, donde relató el duro momento personal que vivió hace dos años, tras la separación con Gissella Gallardo y el alejamiento de sus hijos.
PUBLICIDAD
Durante la entrevista, Pinilla confesó que tocó fondo emocionalmente. “Volví a trabajar. Estuve con una depre súper grande, con crisis de pánico. Entraba al estudio y me bajaba la crisis de pánico y no podía trabajar. Se me aceleraba el corazón, las manos mojadas, se me apretaba la cabeza, no podía hablar, no podía expresarme”, relató, visiblemente afectado.
El exdelantero explicó que su estado fue producto de un cúmulo de factores que se agravaron con su propio comportamiento. “Se me juntó todo, me porté como el pi… Estuve haciendo cosas que no tenía que hacer, me aislé, me encerré con mi mamá que tenía cáncer de laringe, no salía, no hacía vida social. Me ponía a chupar solo en la casa”, confesó.
Fue entonces cuando tomó una drástica decisión para intentar cambiar el rumbo de su vida: “Llegué un día y dije ‘no puedo seguir así, quiero recuperar a mi familia, recuperar a mis cabros chicos y dar vuelta la página’ y me metí en un tratamiento para las crisis de pánico de ansiedad y la depresión”.
“Quería desaparecer”
Pese a la terapia, Pinilla no ocultó que vivió momentos límite. “Lo pasé como el pi… Estuve cuatro meses que lo pasaba muy mal, muy mal. Ahora estoy impecable, me levanto feliz con energía. Me siento útil, antes me costaba. Lo sufrí mucho, llegué a momentos en que quise quitarme la vida”, confesó.
El exfutbolista también reconoció el profundo dolor que sintió por el distanciamiento con sus hijos. “Lloré un montón, sufría porque estaba perdiendo mi vida. Me veía lejos de los niños, no me pescaban, yo no los pescaba a ellos, no tenía contacto físico con ellos. Me estaba volviendo loco”, dijo.
“Quería desaparecer”, cerró con crudeza, dejando en evidencia la gravedad del momento que vivió, pero también el valor de buscar ayuda para salir adelante.