La octava generación de buses Marcopolo ya está en Chile. Como resultado de más de una década de investigación y desarrollo, el fabricante brasileño aspira a dar un salto cualitativo en su oferta para el transporte de pasajeros en carretera, con la gama G8.
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La marca, representada localmente por Epysa Buses, asegura que los nuevos buses interurbanos son el fruto de siete mil horas de simulaciones virtuales y diez mil horas de trabajo en pista y laboratorios, además de los kilómetros recorridos, para garantizar la calidad y confiabilidad de los G8, que pretende revolucionar la experiencia tanto de conductores, como pasajeros y, también, de los empresarios de transporte.
El primer modelo en arribar a nuestro país es el Marcopolo Paradiso 1800 DD G8, cuyo aspecto más destacado por el fabricante es el de la seguridad, gracias a una estructura diseñada y probada para garantizar una mayor protección a los pasajeros. De hecho, Marcopolo fue la primera empresa del mundo en realizar pruebas de volcamiento físico en un vehículo de dos pisos, obteniendo la certificación de la Vehicle Certification Agency (VCA), en cumplimiento de los más estrictos estándares.
Otra de las especificaciones destacadas del bus de dos pisos es que está fabricado con materiales más livianos pero a su vez más rígidos, que permiten mejorar también sus líneas, haciéndolas más estilizadas y mejorando en un 11 por ciento su coeficiente aerodinámico. Además, el sistema ERV, opcional, con visión nocturna, sustituye los espejos por cámaras, eliminando los puntos ciegos y generando una aerodinámica superior y mayor eficiencia operativa.
Para distinguirlo aún más, los G8 lucen faros full led, mejorando visibilidad hasta 3,5 veces respecto de sus competidores en el mercado.
Su parachoques presenta un nuevo diseño, producido con un proceso de inyección reactiva a baja temperatura y materiales que aumentan la resistencia y robustez de los componentes, dando como resultado una pieza de alta resistencia y gran capacidad de deformación.
También la cabina del conductor ha sido rediseñada, ofreciendo una mejor experiencia de comodidad. El asiento Ergodesign, con espuma en forma de caparazón, sumado a los paneles y revestimientos internos con concepto soft touch, generan un espacio con más confort termoacústico y visual.
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El tablero de instrumentos tiene pantallas de 5 ó 10 pulgadas, en las que se accede a todas las funciones del bus, y es 3,5 veces mejor que los que ya existen en el mercado. La altura se reduce en 70 milímetros, para aumentar la visibilidad al exterior.
El defroster rediseñado presenta un 23 por ciento más de eficiencia, lo que mejora el confort térmico del conductor y reduce el tiempo de desempañado del parabrisas.
Manteniendo el énfasis de la marca por la seguridad, el Marcopolo G8 cuenta con una zona traslúcida en la parte inferior de la puerta derecha que ayuda a visualizar pequeños objetos y plataformas de embarque.
Y la nueva celda de supervivencia para ocupantes de la cabina ofrece una deformación 78 por ciento menor a los límites establecidos por la norma ECE R66, otorgada por la Vehicle Certification Agency (VCA).
Además, pensando en los pasajeros, la iluminación del salón es indirecta y homogénea, sincronizables con las condiciones naturales del día o de la noche, dejando el ambiente cálido y relajante. Los asientos también mejoran la ergonomía y ofrecen con nuevos cortes de tejido y diferentes tipos de espuma, lo que se complementa con un sistema de reclinación completamente rediseñado, que permite un ajuste preciso de forma suave y silenciosa.
El G8 cuenta con una plataforma que permite ofrecer a los pasajeros diferentes medios de entretenimiento colectivo o individual con audífonos, USB integrado e imagen digital de alta definición.
Pensando en las necesidades de la industria del transporte de pasajeros, Marcopolo incorpora mejoras como del sistema de apertura de la rejilla delantera, de fácil manejo, que permite un mejor acceso al defroster, permitiendo un mantenimiento ágil. También posee focos híbridos con sistema que elimina el desmontaje total de la pieza para el ajuste de las lámparas, y los espejos retrovisores pueden ser reemplazados por una sola persona, con acceso externo, para cambiar los componentes.
Los vidrios laterales curvos presentan menos vibración y son de fácil mantenimiento, sin aplicación inferior de cordón de acabado.
La tecnología 2022 ofrece nuevos modelos de centrales electrónicas de fácil acceso y organizados por distinción de funciones. El sistema eléctrico se puede monitorear de forma remota y los módulos se pueden actualizar a través de un servicio on-line Marcopolo.