Optimizar tu consola nunca fue más simple. La Playstation 5 trae directamente la conexión para agregar, en simples pasos, un disco SSD. Revisamos un modelo poderoso: el Kingston FURY Renegade.
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Sobre el papel ofrece hasta 7.300/7.000 B/s de lectura y escritura gracias al controlador Phison E18 equipado y memorias NAND TLC de 176 capas de Micron.
El Kingston FURY Renegade SSD no aporta ninguna sorpresa en cuanto a su presentación, pese a ser el modelo de mayores prestaciones. Viene en un simple blíster de cartón con encapsulado de plástico. El contenido se limita a la presencia del SSD, nada de documentación salvo la impresa en el propio cartón a color.
Pequeño y poderoso
Su diseño no tiene demasiados alicientes respecto a otras unidades al menos en tamaño: 80 mm de largo, 23 mm de ancho y un grosor que va desde los 2,21 mm para las versiones de 500 GB y 1 TB y 3,5 mm para las versiones de 2 y 4 TB al tener chips a doble cara.
Kingston ha colocado una pegatina en la cara inferior del SSD, la cual no debemos arrancar si queremos mantener la garantía. Y la novedad por así decirlo será la integración de una lámina de aluminio y grafeno sobre la cara superior que actuará como disipador o en su caso, como transmisor del calor al disipador de la placa base.
Uso por 3 meses
Este es un dato no menor, ya que por lo general, se recomienda aplicar disipadores en estos discos. Venden kits para aquello. Si bien la unidad no lo necesita, la recomendación sigue “mejorando aún más” la disipación de calor. Ideal para Playstation 5.
Así lo instalas en tu consola:
Durante su uso por 3 meses no mostró dificultad alguna en su desempeño. Una fluidez excepcional, incluso con los videojuegos más exigentes.
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Aún en más profundidad, respecto a lo técnico, resiste vibraciones de hasta 2,17G en servicio y 20G en reposo, soportando hasta 1.800.000 horas de MTBF (tiempo medio entre fallos). Soporta condiciones de servicio con temperaturas de 0 a 70ºC y temperaturas de seguridad para el almacenamiento entre -40ºC y 85ºC.
Estos datos serán los mismos que otras muchas unidades al contar con las mismas certificaciones de calidad conforme a las normas CE y demás países o continentes
Phison: un controlador a toda prueba
Kingston FURY Renegade SSD cuenta con memorias Micron NAND TLC 3D de 176 capas con rebrand por parte de Kingston denominándolas FB25608UCM1-9E. Unas de las que ofrecen mayor densidad de almacenamiento del mercado, basándose en celdas de 3 bits como es habitual en TLC, y sustituyendo a las anteriores de 96 capas.
El controlador es el Phison PS5018-E18 PCIe 4.0, la especificación más potente disponible, basado en un proceso de 12 nm TSMC con arquitectura ARM Cortex-R5.
Su configuración interna consiste en 3 núcleos a 1 GHz y 2 núcleos Dual CoXProcessor 2.0, alcanzado los 1.000K de operaciones por segundo (IOPS) en lectura y escritura aleatorias.
Como el resto de SSD Gen4, de rendimiento top, soporta NVMe 1.4, mejorando la tasa de transferencia por canal de 800 MT/s a 1200 MT/s en sus 8 canales. Junto a él se encontramos una configuración de 2 GB de memoria DRAM Kingston DDR4-2666 MHz D5116AN9CXGRK.
Calidad para jugar tranquilamente
Las latencias mostradas son realmente bajas y acorde a esta unidad. Kingston nos muestra su asalto a los SSD topes de gama con una unidad simple en lo que a diseño se refiere, utilizando una delgada placa de aluminio y grafeno confiando en que tengamos placas base con disipadores.
Las temperaturas bajo estrés han sido bastante buenas, así que será adecuado para su uso en PS5 tal y como asegura su compatibilidad.
Kingston FURY Renegade SSD proporciona una garantía de 5 años con asistencia técnica gratuita durante este período. Sin duda un aliado para tus partidas en la nueva generación de consolas.
