Desde la explosión del ChatGPT, a finales del 2022, expertos en tecnología han impulsado la iniciativa de la creación de un dispositivo especial para la inteligencia artificial. Sam Altman opina que esto es innecesario. Piensa que sistemas como los que desarrolla su empresa, OpenAI, pueden funcionar sin problemas como un mecanismo digital alojado en la nube.
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El CEO de Open AI opina sobre los actuales desarrollos de hardware, que se fabrican especialmente para la inteligencia artificial. Y aunque algunos le parecen interesantes, como el Humane AI Pin, no cree necesario ese tipo de aparatos.
Sam Altman emite estas declaraciones desde Cambridge, Massachusetts, durante un evento organizado por la Universidad de Harvard y la firma de capital de riesgo Xfund. “No creo que requiera una nueva pieza de hardware”, dijo sin rodeos el CEO de OpenAI.
Lo que sí piensa es que, en lugar de hardware, la inteligencia artificial probablemente requiera de mejor software para tener una mejor capacidad de almacenamiento, que se traduce en un mejor funcionamiento.
Altman dice que cuando trabaja con la inteligencia artificial imagina futuros agentes que pudieran vivir en la nube, según reseña Business Insider.
El creador del ChatGPT explica que su idea de la inteligencia artificial es un “colega súper competente que sabe absolutamente todo sobre mi vida, cada correo electrónico, cada conversación que he tenido, pero no se siente como una extensión”. En pocas palabras, lo que Sam Altman imagina es un Jarvis de Iron Man, por poner un ejemplo familiar.
Dispositivo para la inteligencia artificial
De igual forma, hay rumores de que Sam Altman quiere desarrollar un dispositivo especial para la IA, y para eso se habría puesto en contacto con Jony Ive, el legendario diseñador industrial detrás de productos icónicos de Apple.
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El “iPhone de la IA” se diferenciará de sus predecesores por ejecutar los modelos de IA de forma local, eliminando la necesidad de una conexión a internet constante y mejorando la velocidad de respuesta.
Para lograrlo, será fundamental el desarrollo de chips especializados en el procesamiento del lenguaje natural (LPUs) como los que propone Groq.