“Si le quito a una persona la pena, la angustia y la rabia no tengo a una persona feliz, tengo una vacía. Las habilidades son distintas para llegar a cada cosa”
Florencia Pérez, universitaria “Estudio Sicología en la UC, me interesa harto el tema porque en la universidad el enfoque de la sicología es mucho más negativo”.
Luz María Phillips, orientadora educacional “Hice mi diplomado en sicología positiva, me atrae trabajar la fortaleza de las personas pues incrementan su felicidad”.
Patricia Aitken, sicóloga “Vine con una amiga seguidora de la sicología positiva, me interesó y ahora compré los libros de Seligman para conocer más”.
El padre de la sicología positiva, el sicólogo e investigador estadounidense Martin Seligman, expuso por primera vez en Chile sobre lo que define como “el movimiento que promueve el estudio científico de las emociones positivas y de las características positivas de las personas en vez de los aspectos negativos”.
Una audiencia principalmente femenina compuesta por sicólogos, profesores y personas que desean usar estos conocimientos para aplicarlos en su vida, lo escucha atenta.
“El objetivo de la sicología positiva es logar el bienestar, que no es lo mismo que la felicidad”, explica el invitado principal del Seminario Internacional sobre Felicidad de Enhancing People y el Instituto de la Felicidad de Coca Cola.
La teoría se basa en cinco conceptos, “Perma” por sus siglas en inglés, que son: emociones positivas, involucramiento, relaciones, significado y logro. “Son necesarias nuevas premisas, entre ellas, tener emociones positivas, moverse jalados por el futuro y no por el pasado y construir condiciones habilitantes y no discapacitantes para florecer”, explica el profesor, quien asegura que quienes siguen estos preceptos tienen un alto nivel de bienestar, les va bien en la vida y son más felices.