Pablo Chill-E volvió a defender este domingo su show para 100 personas en La Granja en medio de las restricciones de aforo para espacios cerrados por las medidas sanitarias de Gobierno para reducir la alta tasa de contagios a covid-19 de las últimas semanas.
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El cantante de trap, que el pasado viernes fue sorprendido por Carabineros realizando un recital para un centenar de personas, pese a la prohibición de realizar reuniones masivas, y en el que sólo pudieron ser detenidas dos personas luego de la fuga de la mayoría de los asistentes, ayer había explicado que su show era un espectáculo a beneficio de un amigo al que se le había quemado su casa.
Y este domingo aprovechó su cuenta Instagram para culpar al Gobierno y a los más ricos del país, para justificar su falta sanitaria. «Cuando ayudo nunca me ha gustado hacerlo público, porque yo hago las cosas de corazón, pero debido a las difamaciones que me han hecho en los medios y a varios ignorantes sin corazón por las redes, dejo este comunicado para demostrarles que no estaba haciendo una ‘fiesta clandestina’ como me acusan».
«Frente a las necesidades de la población y un caso de incendio donde se perdió una vivienda, nos vimos en la necesidad de solidarizar con las personas que en estos momentos no están recibiendo ni un tipo de apoyo del Estado», arrancó el artista, quien pidió a la gente «tener ética y empatía por los que no tienen que comer, es muy fácil vivir en comodidad, lujos y dar cátedra de la exposición frente al covid-19, mientras en las poblaciones los pobres pasamos hambre, frío, la mayoría sin derecho a trabajar y sin ayuda humanitaria por parte de las instituciones públicas. Los ricos se hacen cada vez millonarios a costa de la pandemia, el pueblo ayuda a sobrevivir esta realidad. Ellos nunca van a saber lo que es la solidaridad, lo que son las ollas comunes, lo que es perder tu casa completa en un incendio y no saber el día de mañana donde pasarás la noche».
Aunque evitó profundizar en la falta sanitaria por la cual Carabineros detuvo a dos personas, el joven insistió en que su show no fue un «concierto clandestino en la población, es ayudar al que está peor que uno, es solidaridad, es apoyo mutuo, es amor, es unión y eso a la elite le provoca miedo».
