Wayne Rooney es una leyenda indiscutible en Manchester United: goleador histórico del club con 253 tantos en 559 duelos, logrando 18 títulos en los 13 años que defendió la camiseta roja, incluyendo 5 Premier League, una Champions League y una Europa League.
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Sin embargo, en los últimos años el insigne goleador fue perdiendo efectividad frente a las redes (en la última temporada marcó sólo 8 tantos), cuestión que le pesó en un plantel muy competitivo como el del United.
Debido a esto, la era de Rooney en Old Trafford llega a su fin en 2017. Los medios ingleses informaron este sábado que el jugador ya se habría realizado los exámenes médicos de rigor para volver al Everton, club que dejó en 2004 tras 77 partidos jugados y 17 goles marcados.
La llegada de Romelu Lukaku, precisamente desde los Toffes, habría apurado su salida. Además, «Wazza» no era considerado como titular por el actual técnico, José Mourinho, situación que lo tenía incómodo en el Teatro de los Sueños.
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En este período de transferencias, el inglés sonó con fuerza en clubes de la MLS y la Superliga China. Pero su deseo de volver al club que lo formó, pesó en la decisión final. Incluso, el futbolista habría disminuido considerablemente su salario y llegaría sin costo para la dirigencia de los de Liverpool, según medios ingleses.
Con la llegada de Rooney, el conjunto que dirige el holandés Ronald Koeman suma cinco refuerzos: Sandro Ramírez (desde Málaga), Davy Klaassen (desde Ajax), Michael Keane (desde Burnley) y Jordan Pickford (desde Sunderland).
Así llega a su fin una de las trayectorias más espectaculares de las últimas décadas en el fútbol inglés.
