Nicolás Córdova ha sido una de las mayores apariciones jóvenes de técnicos chilenos en los últimos años. El entrenador, ex seleccionado de la Roja, comenzó su carrera en una cabina técnica en 2015 y lleva una meteórica carrera.
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Y este sábado dio el batatazo, al conquistar su primer trofeo oficial como DT en la Copa Chile 2017 junto a Santiago Wanderers, tras vencer a Universidad de Chile por 3-1 en la final jugada en Concepción.
No es antojadizo decir que Córdova, de apenas 38 años, es uno de los entrenadores con más futuro del fútbol chileno y necesitaba un gran respaldo para hacerlo. Y se dio al final, porque este trofeo, es el primero de esta nueva camada que logra una corona.
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Su estilo de juego y sus variaciones tácticas, dignas de sus estudios en Europa, hacen del ex volante de Colo Colo uno de los adiestradores que más porvenir tiene en nuestro fútbol. Pero eso, debía ratificarlo con resultados y este sábado lo logró.
Rápida explosión
Tras un corto y fructífero paso por la Selección Sub 20, donde en 2015 ganó el prestigioso torneo de L’Alcudia en España, fichó en Palestino en 2016 en la que consiguió una enorme campaña.
Terminó 4º en el Clausura 2016 en su torneo debut en el profesionalismo, quedando a cuatro puntos del campeón Universidad Católica y conquistó un cupo en la Copa Sudamericana.
Y en su primera incursión internacional logró una hazaña, porque llevó a los árabes a cuartos de final del segundo certamen más importante del continente tras eliminar a Libertad de Paraguay y Flamengo de Brasil. Solo San Lorenzo de Argentina detuvo la carrera de los tetracolores.
Caída y levantada
Sin embargo, 2017 comenzó mal para Córdova. Luego de un buen año en Palestino, en marzo terminó siendo dejando la banca árabe por una muy mala campaña, que lo tenía colista en el Clausura y además de una dolorosa derrota en primera fase de la Sudamericana ante Atlético Venezuela. Lo reemplazó el argentino Germán Cavalieri.
Parecía que le iba a costar retomar ese buen rendimiento, pero Wanderers confió en él y lo contrató para el segundo semestre con un claro objetivo: salvarse del descenso por la mala temporada anterior.
En el Transición las cosas no han ido bien, de hecho los verdes siguen luchando por no caer en la promoción en una dura lucha con Palestino y Curicó Unido, pese a que el rendimiento no ha sido tan malo. Pero los números del 2016-17 lo condenaron a esta situación.
Sin embargo, en la Copa Chile todo fue glorioso. Superando numerosos obstáculos, los caturros conquistaron la corona al vencer en la final a Universidad de Chile por 3-1, lo que significó la primera corona de Córdova como DT profesional.