La Selección chilena logró una importante victoria ante Suecia por 2-1 en el Friends Arena en el estreno de Reinaldo Rueda en la banca nacional. El partido tuvo una particularidad, Chile jugó prácticamente de local, ya que la Marea Roja armó una verdadera fiesta en las gradas del estadio.
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Cuando el equipo chileno salió a la cancha fue recibido con un hermoso mosaico y al momento de entonar el himno, los fanáticos se hicieron sentir, ya que lo cantaron hasta el final y de manera muy emotiva.
Durante el compromiso, la Roja siempre sintió el aliento de los fanáticos, quienes cantaron durante los 90 minutos. El gol de Arturo Vidal fue gritado con euforia y pese al rápido empate de los suecos, no dejaron de apoyar al elenco de Rueda.
En el complemento, cuando el partido era algo lento, los hinchas subieron el tono de su voz para cantar con más fuerza. La conquista de Marcos Bolados, que le dio la victoria a Chile en el último minuto, fue la guinda de la torta para la jornada soñada para los fanáticos de la Roja que vieron ganar a su equipo en territorio ajeno.
Tras el partido, los jugadores de la Selección agradecieron el apoyo y le dedicaron el triunfo, saludando a los más de 10.000 fánaticos que se apostaron tras uno de los arcos del Friends Arena.
Rueda valoró el apoyo de la afición durante los 90 minutos: «Darle las gracias a la afición chilena, fue muy bueno su aporte, estuvimos bien respaldados, una atmósfera bien positiva y de gran respaldo, sabemos de la colonia que hay acá«.
«Eso compromete, es importante en lo anímico en esta transición difícil que se contagie esa mística positiva. El equipo se lo ha ganado (respeto y cariño) en la cancha, un estatus a nivel internacional«, expresó Rueda.
