Una temporada de dulce y agraz tuvo Cristián Cuevas en Holanda: el Cimbi se ganó un puesto fijo como titular en la oncena del Twente, pero su equipo terminó bajando a la segunda división holandesa. Su campaña individual no pasó desapercibida para Reinaldo Rueda, quien lo citó para la gira europea de la selección chilena, donde apenas disputó tres minutos en el último partido ante Polonia tras ingresar por Nicolás Castillo, en su debut por la Roja adulta.
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Desde entonces está de vacaciones en su natal Rancagua, pues finalizó su préstamo en el cuadro tulipán y quedó libre del Chelsea, que era dueño de su pase. Su intención, ahora, es seguir en Europa.
«Ojalá, eso es lo que quiero», avisa el zurdo desde la Sexta Región. «Hasta ahora no hay nada concreto, pero en Europa queda todo julio y agosto, así que igual estoy tranquilo», complementa.
En el caso de que no llegue una oferta tentadora desde el otro lado del charco, no descarta regresar al fútbol criollo. «Todo dependerá de si no tengo nada afuera. Si hay algo acá en Chile que me convenza y que sea más o menos parecido, no tendría problemas en quedarme», advierte.
¿Una nueva oportunidad en la U? «Sí, estaría buena. También me gustaría volver alguna vez a O’Higgins, de donde salí, porque los dueños son buenas personas y se portaron un siete conmigo cuando estuve acá. Sería lindo», cuenta.
Más allá del país, el mundialista sub 20 en Turquía 2013 pretende estar en un club que le permita ser opción para la Roja. «Ésa es la idea, por eso hay que tomarse las cosas con calma para tomar la mejor decisión. El objetivo es tratar de llegar a la Selección y formar parte del recambio, porque se viene la Copa América», cierra el Cimbi.