«Ya me aburrí de la actitud de mujeres lloronas (…)», esa fue la polémica y criticada frase que dijo el entrenador de Universidad de Chile, Alfredo Arias, tras la derrota por 2-1 ante Universidad de Concepción, donde se lanzó contra el ex técnico azul, Frank Kudelka.
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La frase generó polémica por la manera en la cual denigra a la mujer, y este lunes, el DT uruguayo salió a ofrecer disculpas por sus dichos tras el duelo. Como era de esperar, Arias recurrió al léxico y recordó las enseñanzas que le dieron sus padres para arrepentirse de sus dichos.
«Fui a Uruguay porque tenia que solucionar algunas cosas y también para fortalecerme con mis afectos, con mi familia y viendo a mis viejitos que están vivos todavía, y muy frágiles me hicieron acordarme de algunas cosas», comenzó diciendo Arias.
Y luego prosiguió: «he tenido un montón de consejos de que no hablara, que dejara que se calmaran las cosas, si yo me equivoco y tengo que aprender y ojalá me equivoque mucho para seguir aprendiendo, y aunque no haya sido mi intención y el contexto que yo quise darle fuera otra cosa, si alguien se sintió dolido por mis palabras, desde ya mis más sentidas disculpas y espero que termine el tema ahí».
Para zanjar la polémica, el charrúa se limitó a indicar que desde ahora, hablará sólo de fútbol con los medios de comunicación.
«Soy entrenador de fútbol, antes jugador de fútbol y tengo la bendición de hacer algo que me apasiona. Desde ahora tendrán solo respuestas de fútbol de mi parte porque no quiero equivocarme más, no quiero herir a nadie más. Y a quienes herido o lastime en un contexto que no esperaba y fuera de mi intención y menos representando a una universidad, jamás lo haría», indicó.
Por último, aseguró que «no le puedo contar a mis padres porque están muy viejitos pero me sirvió para fortalecerme, venir con las máximas ganas y voy dar la pelea hasta el final, voy a dar todo y que la ilusión que tenía en los primeros días que con todas estás las extrafutbolísticas se apagó un poco, vienen revitalizadas».