Columna de opinión: La “Generación Perdida”

Algo pasó en el camino con la Sub 20 de Mario Salas. Hoy estamos pagando los costos.

“La manija que viene”. Guardo como tesoro esa Revista El Gráfico de febrero de 2013, la primera que llevó una nota mía en portada, una entrevista a Bryan Rabello, quien había comandado a la “Rojita” de su generación, la de Mario Salas, al Mundial Sub 20 de Turquía en el Sudamericano de Mendoza, mi querida ciudad materna donde estuve un mes cubriendo el torneo.

El entonces volante del Sevilla era sólo uno más de un equipo que prometía tomar la posta de Alexis, Vidal, Medel y compañía, con variantes ofensivas para regalar. Nicolás Castillo brillaba y estaba en las carpetas de todos los veedores, Diego Rubio ya jugaba en el Sporting de Lisboa, tras su aparición explosiva en Colo Colo, y Felipe Mora era banca porque no cabían más delanteros, pues el “Cimbi” Cuevas, transferido por esos días al Chelsea, era el extremo izquierdo. Ni siquiera fue necesario Ángelo Henríquez para clasificar, ya que el Manchester United, que había pagado 5,5 millones de dólares por su pase, no lo quiso prestar.

Con triunfo sobre el local en el propio estadio Malvinas Argentinas, esta generación parecía reencarnar la estirpe de la encabezada por José Sulantay en 2007. Pero no.

Siete años más tarde, Reinaldo Rueda ve sus alternativas en ataque para reemplazar a un adolorido Sánchez o a un irreconocible Vargas ante Colombia, y no aparece ninguno de ellos. Dos juegan en Estados Unidos, uno lleva parado un buen rato en México y el otro es reserva en Chile.

Algo pasó en el camino, quizá faltó hambre, tal vez madurez o ambas. Puede ser que a eso se refiriera el “Niño Maravilla” cuando criticó el trabajo formativo, que en realidad es de los clubes, no de la ANFP.

Hoy estamos pagando los costos de esa “Generación Perdida”. Ojalá alguno todavía pueda reencontrarse con ese joven de 20 que fue. La “Roja” se lo agradecería.

Tags

Lo Último

Contenido patrocinado


Te recomendamos