Hoy comenzó en el Tribunal de Temuco el juicio oral por la muerte de la sicóloga norteamericana Erica Hagan (22 años), quien fue asesinada en el Colegio Bautista de Temuco en septiembre del año pasado, donde realizaba una pasantía. El único imputado como autor del crimen es el cuidador del colegio Domingo Cofré (44 años), quien insiste en declararse inocente desde que se le imputó el delito.
Y desde Kentcky llegó el padre de Erica, Chris Hagan, quien señaló al principio de su testimonio: “Estoy aquí por el asesinato de mi hija”, según consigna el portal de noticias SoyTemuco.cl.
Asistido en todo momento por una traductora, el señor Hagan se notó muy afectado emocionalmente por la trágica muerte de su hija, a la que describió como “una chica tímida, pero cuando conocía a alguién podía ser más extrovertida”.
Uno de los testimonios que causó más impacto fue el de Harold Gutiérrez, esposo de Marta Muñoz, profesora del colegio que estableció una relación más cercana con Erica. Gutiérrez fue quien encontró el cuerpo de la víctima en el departamento interior del colegio donde se hospedaba, y relató que “vi el baño abierto y el cuerpo de ella sobre la tina. Estaba boca abajo, sumergido, llena de agua. Me dio mucha pena verla ahí, me acerqué y con la cortina -que no estaba colgada- la tomé con dos dedos y cubrí parte del cuerpo. ¿Por qué lo hice? Porque yo tengo una hija y no quería que nadie más viera la desnudez de Erica”.
En la sesión, también declaró la doctora del Servicio Médico Legal, Nubia Riquelme, quien aseguró que las heridas encontradas en el cuerpo de la víctima coinciden con el atizador de chimenea, aunque no estableció que se tratase del arma homicida, tal como plantea la fiscalía y que, según su versión, habría utilizado el imputado Cofré.
De ser declarado culpable, Cofré arriesga una pena de 25 años de presidio, 20 por el delito de homocidio calificado y 5 por el incendio frustrado.
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