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Altos mandos militares «han activado un protocolo humanitario, un cerco (…), que permite el diálogo de organizaciones civiles, de la Iglesia, para lograr precisamente la liberación de los periodistas», dijo William Villamizar, gobernador de Norte de Santander, el departamento fronterizo con Venezuela donde se encuentra esta región de fuerte presencia guerrillera.
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El reportero Diego D’Pablos y el camarógrafo Carlos Melo, ambos de la cadena local RCN, fueron presuntamente retenidos el lunes por actores armados no identificados en el municipio de El Tarra, cuando cubrían la noticia de la desaparición de la periodista española Salud Hernández, ocurrida el sábado en esa misma zona.
«Esperamos que en el día de hoy (miércoles), en las próximas horas, se logre la liberación de los periodistas», precisó Villamizar, en declaraciones a la televisora RCN.
Sin embargo, el presidente Juan Manuel Santos dijo que Hernández estaba con la guerrilla del ELN «por su propia voluntad» realizando un trabajo periodístico.
«De Salud Hernández, la información que tengo, que estoy verificando, es que ella se fue a hacer un trabajo periodístico por su propia voluntad, que se reunió con el ELN y que el ELN está esperando a ver cómo puede regresarla a la libertad», dijo Santos durante una visita al departamento del Chocó (oeste).
El equipo de RCN desapareció en compañía de un chofer, cuyo nombre no fue confirmado, y que según la Defensoría del Pueblo «ya fue liberado» en la mañana de este miércoles.
La Defensoría, que vela por los derechos humanos en Colombia, también dijo que mantiene una «misión» en la zona «a la espera de contactos que permitan el regreso de comunicadores desaparecidos».
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El gobernador de Norte de Santander no precisó si se espera el pronto retorno de los tres periodistas o solo del equipo de RCN, pero sí dijo que el párroco local Alirio Figueroa está mediando para «que no se ponga en peligro la vida de ninguna de las personas que están retenidas».
El comandante del Ejército, general Alberto Mejía, dijo a su vez en una entrevista con RCN Radio que no hay «información contundente» que permita afirmar que la periodista Hernández está en el mismo lugar que los otros dos reporteros.
«Hay un trabajo de mano de la Iglesia, de carácter humanitario, y hay procedimientos que están curso, que nos generan mucha esperanza y esperamos dar un mensaje muy pronto a la familia de los periodistas de RCN», dijo también Mejía, citado por la emisora.
– «Libérenlos ya» –
Decenas de personas se concentraron a mediodía del miércoles en Bogotá para pedir la pronta aparición de los reporteros, mostrando carteles de «Libérenlos ya».
«Que los liberen lo más pronto posible, que lo dejen ejercer su labor eficazmente, ya que él no hace ningún daño a nadie, él solo quiere brindarle información a todo el país», dijo a la AFP Diego Andrés D’Pablos, hijo de uno de los desaparecidos, que participó en la manifestación.
En el acto, en la céntrica plaza de Bolívar, estuvo también presente el expresidente Álvaro Uribe, actual senador y líder de la oposición, quien cuestionó la falta de presencia del Estado en el Catatumbo.Varios medios de comunicación, entre ellos el diario español El Mundo, del que Hernández es colaboradora, han señalado como presunto responsable al Ejército de Liberación Nacional (ELN), que anunció en marzo el próximo comienzo de conversaciones de paz con el gobierno.El arranque de esas negociaciones se han visto frenadas precisamente por la negativa a renunciar al secuestro por parte del ELN, guerrilla que dijo el martes a través de la red social Twitter que no se pronunciará sobre lo ocurrido con los periodistas mientras «no reciba los reportes semanales» de sus estructuras.Desde Washington, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo que las desapariciones de los periodistas «no son aceptables» y señaló que si se trata de un «secuestro» del ELN, atentaría contra el proceso de paz con esa guerrilla.En el Catatumbo, una zona de unos 4.800 km2, actúan bandas narcotraficantes y guerrillas como el ELN, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y disidencias del extinto Ejército Popular de Liberación (EPL), pero ninguno de estos grupos ha asumido la responsabilidad sobre lo ocurrido a los periodistas.Colombia vive un conflicto armado de más de medio siglo, que ha involucrado a guerrillas, paramilitares y fuerzas del Estado y deja ya 260.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados.
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