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Desde que el jueves se conociera el robo que afectó al Museo Histórico Nacional, desde sustrajeron la espada del ex Presidente Manuel Bulnes, varias hipótesis han circulado respecto de cómo se produjo y de qué manera se reducirá la espada considerada un objeto invaluable para la historia chilena.
El jefe de la Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) de la PDI, comisario Marco Fierro, explica a Publimetro que el mercado para este tipo de especies es muy reducido y selecto.
“Esta espada es prácticamente una reliquia por la cantidad de años que tiene, en este caso prácticamente son 180 años los que tiene esa espada, por la connotación histórica y además por el valor material que tiene, por los materiales por los que fue fabricada, el mercado es muy acotado, muy selecto, por lo tanto obviamente aquí la persona que hoy día la tiene, si es que no ha sido reducida, corresponde a un mercado muy selecto y gustoso de especies que tienen un alto valor histórico, patrimonial y cultural”.
Por lo mismo, el efectivo de la policía uniformada plantea que “por las características de este robo y por las circunstancias que lo rodean creemos que una de las posibilidades es que efectivamente corresponda a una solicitud en particular”.
Aunque el comisario no descarta que la pieza pueda ser desmantelada y vendida pos sus metales preciosos, esa marea de reducirla sería la más básica. “De acuerdo con el contexto que rodea a la sustracción, al robo de la espada, nosotros creemos que no va por ahí”, por un robo por encargo.
Sobre la sustracción de especies patrimoniales, el jefe de la Bidema, comenta que si bien es un delito que estadísticamente no se da todos los días, es un delito que ocurre en el país junto con el daño patrimonial.
“De hecho este mismo museo pocos días atrás sufrió un atentado entre comillas, porque una persona quiso provocar un daño a una de las especies que tenían en exhibición”.
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“Pero sí, efectivamente hay gente que se mete a iglesias, a la Iglesia de San Francisco, a la Catedral y aquellas cosas que tienen un valor del que estamos hablando, aparte del valor del material el cual está fabricado, proceden a la sustracción”.
Fierro precisa que en muchos casos los delincuentes se aprovechan “de todas las falencias en las medidas de seguridad que tienen estos lugares, porque son lugares abiertos al público, donde transita mucha gente en distintos horarios, hay horarios en los que transita más gente y obviamente estos sujetos aprovechan estos momentos para poder robar”.
PUB/NL