Muchas personas en Inglaterra perdieron a sus familiares en el incendio en la Torre Grenfell, pero un hombre causó la ira de muchos londinenses. A tal grado que la Policía Metropolitana de Londres detuvo ayer a un hombre por sospecha de fraude.
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Historia que comienza cuando un hombre de 52 años acudió a una comisaría asegurando haber perdido a su hijo, a su esposa y todos los bienes en el incendio de la torre que el pasado 14 de junio fue devorada por las llamas, y pedía conseguir ayuda e indemnización por la pérdida de los bienes y de sus familiares, además de un lugar donde vivir, según informó la BBC.
Sin embargo, luego que las investigaciones policiales han concluido y basándose en testimonios de vecinos, determinaron que su historia es falsa. Sí, falsa. En concreto, no tenía ni esposa ni hijo en el edificio de protección oficial. Además, resultó ser de otro barrio, a kilómetros del lugar de la tragedia.
La misma cadena informó ayer que el número exacto de víctimas mortales del incendio no se dará a conocer hasta «al menos» final de año, cuando terminen las labores de búsqueda y recuperación de cuerpos.
«Lo que podemos decir es que creemos que unas 80 personas están muertas o desaparecidas, pero debo pensar que están muertas», aseguraron las autoridades.
«No quiero que haya víctimas ocultas. Queremos entender el verdadero costo humano de esta tragedia», añadió la Policía, para explicar por qué llevará tanto tiempo hablar de número exacto de fallecidos.
