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Oposición busca aumentar penas para agresores de choferes del transporte público

La iniciativa encabezada por el secretario general de RN, Mario Desbordes, y el jefe de bancada, Leopoldo Pérez, busca frenar la violencia que afecta a uno de cada cinco conductores del Transantiago.

Uno de cada cinco choferes del Transantiago es víctima de actos de violencia. Y a raíz de esta situación, desde Renovación Nacional buscarán aumentar de 3 a 5 años de cárcel las penas para quienes provoquen lesiones graves a conductores del transporte público.

La iniciativa legal será encabezada por el jefe de la bancada de diputados RN, Leopoldo Pérez, y el secretario general de esa colectividad, Mario Desbordes.

Con ella buscan poner freno a la escalada de violencia que han sufrido los choferes de buses en Santiago y en regiones en los últimos años.

Los datos que sustentan la propuesta

Para sustentar la presentación, en RN acudieron a un estudio del académico de la Universidad de Chile Diego Piñol. En él revela que 1 de cada 5 conductores del Transantiago reconoce haber sido agredido en el ejercicio de sus labores. Los ataques van desde insultos, escupitajos, hasta golpes, secuestro del bus e incluso amenazas con armas de fuego.

1 de cada 5 choferes del Transantiago es víctima de violencia

Para Mario Desbordes, “no basta con denunciar». «Tenemos que detener la violencia dando señales claras y aplicando las sanciones que corresponden a la gravedad de los hechos», explica Desbordes.

«Hoy los chilenos se ven expuestos a la violencia todos los días y en el caso de los ataques a choferes es especialmente grave, porque no solo se ellos están en riesgo, sino que también la integridad física de todos sus pasajeros”, señaló el secretario general de RN.

Por su parte, el diputado Leopoldo Pérez afirmó que “no es posible que trabajadores que no tienen ninguna culpa de los fallas del sistema de transportes, terminen pagando el pato y sean agredidos impunemente mientras cumplen con su labor. Es injusto e indigno que sigan recibiendo insultos y agresiones o que derechamente sean atacados por delincuentes sin ninguna respuesta por parte de las autoridades. A eso hoy le decimos basta”.

Caso que encendió el debate

Un caso emblemático se registró el pasado 6 de octubre, cuando José Cotrina (40), conductor del recorrido 225 de Subus, fue apuñalado en 11 oportunidades en su cara, ojos y pecho por no atender oportunamente la solicitud de detención de un pasajero. Debido a la agresión se mantuvo en riesgo vital por días en la Mutual de Seguridad.

Considerando este y otros casos, Desbordes afirmó que «es necesario que los conductores cuenten con Defensa legal activa y efectiva, por parte de las empresas».

El secretario  general de RN plantea además la necesidad de que los buses estén equipados con cámaras de alta resolución, para que las imágenes puedan ser usadas como medio de prueba, cabinas de seguridad y botón de pánico conectado directamente a la empresa y a Carabineros.

Desbordes y Pérez anunciaron que pedirán que, de ser electo nuevamente Presidente de la República, Sebastián Piñera patrocine el proyecto de ley para lograr su pronta aprobación. No obstante, señalaron que las sanciones a los agresores son sólo parte de la solución y que tanto las propias empresas de transportes como las autoridades fiscalizadoras deben avanzar en mejores medidas preventivas, para disminuir los ataques.

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