Estados Unidos fue el primer país en reconocer a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela. Desde los tiempos de Chávez, La Casa Blanca ha apoyado a todos los opositores de la dictadura y esta no ha sido la excepción.
El pasado martes se organizó un levantamiento contra Maduro, Juan Guaidó y Leopoldo López llamaron a los civiles y a las fuerzas armadas de su lado a salir a las calles bajo la consigna de lo que sería la “fase final de la Operación Libertad” que finalmente no logró terminar con éxito el mismo martes.
En EEUU estuvieron muy atentos a lo que pasaba en Venezuela y las declaraciones no se hicieron esperar. Mike Pompeo, secretario de Estado, fue uno de los primeros en hacer declaraciones en Twitter. Aseguró que Nicolás Maduro tenía listo en la mañana del martes un avión para salir hacia Cuba pero Rusia le ordenó que se quedara.
Esto no sería lo único, ya que el gobierno norteamericano asegura que hubo conversaciones entre chavistas y opositores para entregar el poder este martes pero que finalmente no se concretó. “No cumplieron pero aún tienen una chance”, declaró el asesor de seguridad de Donald Trump, John Bolton luego de asegurar que el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno, y el director del la Dirección de Contrainteligencia, Iván Hernández Dala se habían juntado a negociar la salida de Maduro con Juan Guaidó.
Como finalmente no se derrocó a Maduro y los negociadores no colaboraron, el enviado de EEUU para Venezuela, Elliott Abrams señaló que quienes habrían estado haciendo negociaciones con Guaidó “han apagado los celulares” haciendo referencia a los altos mandos. Añadió también: «Hablaron, hablaron y hablaron y cuando llegó el momento de la acción no estuvieron dispuestos a hacerlo».
Actualmente las últimas declaraciones norteamericanas han sido de Bolton. Según él, Maduro está escondido en un búnker que se encuentra custodiado por cubanos.
