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El plebiscito del próximo 26 de abril se acerca y todos los pasos para su implementación se van cumpliendo. Desde ayer, por ejemplo, corre el plazo de siete días corridos para que los partidos políticos que cuentan con representación en el Congreso y parlamentarios independientes manifiesten por escrito su voluntad de participar en la franja electoral.
El Tribunal Calificador de Elecciones, además, entregó a través de un reciente fallo el espacio garantizado que las organizaciones sociales podrán tener en la campaña televisiva que irá entre el 27 de marzo y el 23 de abril. Se trata de 150 segundos para cada una de las cuatro posibilidades de votación, cuyo uso aún no está debidamente delimitado, y que se definirá «durante la presente semana», según informó el Consejo Nacional de Televisión.
Entre la duda y el acercamiento
Desde la Mesa de Unidad Social, el dirigente Esteban Maturana informó que «esperamos conocer la resolución del Tricel», que su intención es participar en la franja y manifestó sus aprensiones ante la idea de que los partidos intenten «imponer sus reglas» sobre los contenidos, cosa que «no estamos dispuestos a aceptar«. Eso sí, reconoce que «hay tiempo para conversar«.
Maturana, también, dijo esperar que los partidos «sean generosos con nosotros» a la hora de entregar minutos de emisión, y dejó claro que si algún miembro de la Mesa aparece en la producción de otro movimiento tendrá que hacerlo a título personal o como integrante de esa tienda. Sobre si pueden compartir tiempo con otras organizaciones, señaló que «los partidos tienen el legitimo derecho de concordar los espacios«, aunque deben recordar que son «parte del problema» y «difícilmente» de la solución a los problemas del país.
Sobre la magnitud de su aparición, el dirigente dijo que esperan aparecer en ambos bloques («Apruebo-Rechazo» y «Convención Mixta Constitucional- Convención Constitucional»), y reafirmó su petición sobre que nadie intente «aprovecharse del colectivo para arroparse«.
En tanto, el presidente de Fuerza Nacional Raúl Meza señaló que «esperamos y confiamos que los partidos políticos, en nuestro caso de ChileVamos, actúen pensando siempre en el bien superior que significa salvar y defender a nuestra querida patria«. Además reconoció contactos preliminares con la UDI, que se habría mostrado «muy disponible y abierta».
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«Esperamos conversar abierta y transparentemente, sin establecer condiciones de ninguna naturaleza«, afirmó, recalcando que «no estamos dispuestos a que se nos establezcan vetos o censuras ni a los contenidos ni a las personas«.
Meza adelantó que esperan aparecer en ambos bloques para «mostrarle a la ciudadanía los logros institucionales, las libertades, el crecimiento y la estabilidad que nos ha entregado durante 30 años la Constitución Política de 1980«, y «reafirmar que votaremos por el rechazo a una nueva Constitución sin miedo«.
En el caso de otras organizaciones, se encuentran a la espera de que se termine de clarificar el proceso para comenzar diálogos con los partidos. Es el caso del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, Movilh, cuyo vocero Óscar Rementería confirmó que han sostenido «algunas conversaciones» y que se encuentran dispuestos a participar junto a cualquier movimiento que aspire a una nueva Constitución redactada por la ciudadanía. En el caso de la ONG Observatorio Ciudadano, en tanto, la coordinadora del programa «Ciudadanía e interculturalidad» Paulina Acevedo manifestó que siempre han trabajado en unión con otros actores sociales, y que si éstos les ofrecen la oportunidad «la vamos a tomar».
En lo que todos coinciden es que hay que aprovechar el tiempo al máximo, y lograr los acuerdos necesarios para llegar a las pantallas de millones de chilenos desde el próximo 26 de febrero, a eso de las 12:45 horas.
