En medio de la ola de manifestaciones que se ha tomado buena parte de Estados Unidos, una institución empieza a repetirse con frecuencia: la Guardia Nacional, una institución que no existe en Chile y que podría ser clave para contener las protestas que estallaron tras el asesinato de George Floyd a manos de un policía blanco en Minneapolis.
La Guardia Nacional la componen reservistas voluntario, casi 500 mil en todo Estados Unidos y en cada estado posee una, la que depende del respectivo gobernador.
Tienen instrucción militar que es controlada y supervisada por el gobierno federal, pues estos efectivos manejan un arsenal similar al de las Fuerzas Armadas, con tanques, armas de grueso calibre, incluso aviones caza.
Generalmente son llamados por situación de convulsión interna mayor, cuando los departamentos de policía son superados y su accionar responde al gobernador.
Es así como cada gobernador es quien decide cuándo, dónde y cómo actúa la Guardia Nacional. Actualmente hay más de 5.000 efectivos de esta organización armada dispersos en 15 estados para hacer frente a la ola de manifestaciones sin precedentes que vive Estados Unidos.
