La lucha por encontrar la vacuna contra el coronavirus sufrió un duro revés este martes, luego que la Universidad de Oxford y el laboratorio AstraZeneca tuvieran que suspender sus ensayos clínicos.
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La decisión la dio a conocer un portavoz de la firma, quien señaló que hubo una reacción adversa grave en un paciente en Reino Unido y el «proceso de revisión estándar de la compañía provocó una pausa en la vacunación para permitir la revisión de los datos de seguridad«.
AstraZeneca aclaró que «esta es una acción de rutina» y que se puede dar durante la fase 3, mientras que desde el sitio especializado Star News señalaron que lo más probable es que el laboratorio haya decidido poner pausa al proceso y no haya sido una determinación de algún ente regulador.
Esta vacuna es la que terminará su desarrollo en Argentina y México, tal como lo anunció el presidente trasandino Alberto Fernández, aunque la pausa no necesariamente signifique un retraso significativo para la región.
Cabe recordar que la vacuna de Oxford no es la única que se desarrolla a nivel mundial, ya que el equipo de Janssen, división farmacéutica de la multinacional estadounidense Johnson & Johnson eligió a Chile para sus ensayos clínicos.
