La desaparición de Tomás Bravo, de tres años, ha provocado un terremoto en la familia del niño. Esto al dolor y preocupación obviamente, pero además, causada por la separación de sus padres.
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El niño vive con su madre y con la familia de la mujer. De hecho, su tío abuelo-con quien vive- fue la última persona en verlo, ya que fueron juntos a encerrar a unas vacas, cuando el menor se esfumó.
De acuerdo a la familia materna de Tomás, el padre del niño no tiene contacto con su padre. «No es un padre presente», aseguró Elisa Martínez.
Y es que Moisés Bravo, padre del niño, ha responsabilizado al tío abuelo del niño, Eduardo Martínez, de ser el responsable de la desaparición del menor. Y fue más allá, ya que sostuvo que el hombre en lugar de avisar de inmediato sobre el hecho, fue a verse el taro.
“Dice que entre 5 ó 7 minutos lo buscó, le gritó y ya no estaba… En vez de avisar fue a Arauco a verse el tarot. Después de eso avisó”, señaló Moisés Bravo.
“¿Por qué que no avisó de inmediato? Cualquiera se va desesperado a la casa a decir lo que pasó. Él es responsable directo de la desaparición de mi hijo. El salió con mi hijo, no salió solo”, agregó.
Por otro lado, Valentina Leal, tía de Tomás, indicó que familiares del padre del niño son los responsables del apedreo a sus casas.
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Valentina relató a «Contigo en la Mañana» que «hemos estado en vela toda la noche, nos han apedreado las casas».
La mujer asegura que hace dos años que el padre de Tomás no ha tomado contacto con el niño.
