Passapoga realizó este lunes una “manifestación” en el acceso principal a sus instalaciones en Providencia. El dueño del club nocturno y presidente de la Asociación Nacional de Empresarios Nocturnos (Anetur), Fernando Bórquez, dijo que la quiebra es una “realidad muy cercana”. Los trabajadores exigieron al Gobierno que les permitan funcionar durante la pandemia.
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En declaraciones a TVN, Bórquez dijo que por las disposiciones del plan Paso a Paso, “los aforos son muy pequeños, está el toque de queda. En Chile solamente se puede bailar, según autorizan las patentes de alcohol, desde las 19 horas. Por lo tanto, con un toque de queda a las 10, tenemos dos horas para hacer nuestra actividad”.
El club nocturno atraviesa tiempos difíciles. No ha podido abrir sus puertas debido a la crisis sanitaria del Coronavirus y, de acuerdo a su administrador, la quiebra “es una realidad muy cercana».
Además, Bórquez dijo que son un “gremio olvidado” y aseguró que el nuevo plan Paso a Paso no beneficiará al sector. Es por ello que advirtió que “la posible quiebra de un local como Passapoga es la posible quiebra de toda la industria. Más de 50% de los locales ya han tenido que bajar su cortina y seguimos olvidados. Hay un decreto supremo que prohíbe el funcionamiento de las discoteques, los cabaret y también prohibía los gimnasios, los cines. Pero a éstos los incorporaron a los procesos de apertura y nosotros seguimos cerrados”.
Es por ello que el dueño del Passapoga dijo que “se nos debe permitir trabajar de toque a toque, como sucedía antes. Bajar además los aforos para la existencia de nuestros negocios. Mínimo una persona por 5 metros cuadrados, una medida suficiente para funcionar. No recibimos ayuda del Estado. Hay locales con ventas de $70 millones y han recibido $4 millones del Fogape. Hay familias que viven de esto y no vemos una luz al final del túnel”, concluyó.
Es por ello que Bórquez llamó a ver los casos extranjeros: “Países como Perú y también en Europa ya están trabajando con medidas de seguridad y nosotros estamos disponibles para exigir lo que pide el Gobierno, que es el carnet verde”.
