Una doctora fue despedida de un hospital de Inglaterra luego de comprobarse que había dejado su guardia para realizar una siesta, dejando a todos sus pacientes esperando por atención.
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Raisah Sawati, profesional de 33 años, que se desempeñaba en el Hospital Fairfield, fue apartada del centro médico luego que el tribunal de Médicos de Manchester estableciera su acto como una «mala conducta» respecto de sus obligaciones asistenciales y asumiera que fue «deshonesta» y «poco eficiente» en su «desempeño profesional».
Según informó el diario The Sun, Sawati fue descubierta por una enfermera que por varios minutos estuvo buscándola y que luego de llamarla cuatro veces cada 10 minutos se dio cuenta que la doctora estaba acostada en el vestuario de mujeres.
«Fue la primera vez que recuerdo que un médico había desaparecido en el departamento de urgencias», explicó la enfermera al tribunal, que aseguró que no sólo ella trataba de ubicarla.
«El personal de enfermería la había estado buscando para preguntar por un paciente, de hecho yo también la estaba buscando para preguntar por un paciente», dijo.
La sanción motivó la inmediata reacción de Sawati, quien reconoció estar «conmocionada» por la pérdida de su carrera, aún cuando otros medios británicos aseguraron que ella ya había tenido otros episodios de negligencia médica, entre los que se cuentan el haber «fallado en el tratamiento de un paciente de un asilo de anciano que murió de insuficiencia respiratoria; haber exagerado su papel en el tratamiento de un bebé que sufría un paro cardíaco; haber mentido a sus colegas sobre obtener tiempo para estudiar y sobre sus calificaciones durante una entrevista de trabajo».
Según The Sun, la doctora Sawati, que se graduó de la universidad en 2012, «ha sido fuertemente criticada por su trabajo en ocasiones anteriores. Como en 2015, mientras trabajaba en Manchester Royal Infirmary, fue encontrada a la 1 pm acostada en una cama abatible en una sala de guardia en el Departamento de Anestesia con las luces apagadas».