La Escuela de Formación de Carabineros “Alguacil Mayor Juan Gómez de Almagro” es la encargada de capacitar a los carabineros de Orden y Seguridad que se despliegan a lo largo del país y es donde se están desarrollando las mejoras para formar al “carabinero del Centenario”.
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La institución se ha propuesto formar “profesionales del área de la seguridad y lo hacemos con estructura educacional, basada en los requerimientos y las exigencias de un plantel que forma personas al servicio público”, explica la mayor Jimena Oñate Silva, jefa de Estudios de la Escuela de Formación de Carabineros.
“Uno de los énfasis más grandes que ha propuesto la institución, son los derechos humanos, que siempre han estado presente en la formación, pero ahora los reforzamos en el rol policial, ofreciendo a la ciudadanía seguridad y confianza en nuestro actuar”, continúa la mayor Oñate.
En los ahora cuatro semestres de formación que reciben los carabineros alumnos, tienen diez asignaturas de las áreas de “Operaciones y Procedimientos Policiales y de Ciencias Policiales, donde reciben las herramientas para enfrentar a los delincuentes y prevenir los delitos”, explica la mayor Oñate.
Es con estos conocimientos que desempeñan en la etapa final de su formación, la práctica profesional de un semestre de duración, donde desarrollan labores en una comisaría para ver el trabajo diario que allí se realiza, tanto al interior de la unidad como en la calle.
Con todo esto, el carabinero egresa de la Escuela de Formación preparado para relacionarse con la comunidad y enfrentar la delincuencia. Gracias a esto, “el carabinero recién egresado se convierte de inmediato en un funcionario activo para la unidad que se le destine. El proceso formativo actual, permite una preparación integral de los nuevos carabineros, quienes incluso egresan certificados para el uso de armas”, explica la mayor Oñate.
De hecho, para finalizar su paso por la Escuela de Formación, los carabineros alumnos son evaluados con una simulación de procedimientos. “Actualmente evaluamos cuatro hitos: primeros auxilios, flagrancia, sitio del suceso y denuncia, como una suerte de examen de título. Es decir, el carabinero se pone a prueba para atender a una persona que está infartada o que requiere atención médica de urgencia, para reducir a un detenido, para analizar y proceder en un sitio del suceso donde ha ocurrido un delito y hay que levantar muestras, y para acoger una denuncia”, tal como lo haría en un servicio habitual en comisaría, comenta la mayor Oñate.
Así, quienes quieran formar parte de la institución serán formados y guiados para proteger a la ciudadanía como profesionales del Orden y la Seguridad.