Si bien lleva años en el ojo público, la actriz Ingrid Cruz no está acostumbrada al escrutinio que conlleva la farándula. Ella se vio enfrentada a esto el pasado julio cuando reveló un maltrato que habría recibido de parte de Pancha Merino, quien se lo devolvió asegurando que lo hizo porque fue la amante de Luciano Cruz-Coke.
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Esto fue desmentido por la actriz de Mega, quien señaló que no estuvo con Luciano cuando estaba con Francisca, y que fue antes de que ellos comenzaran a pololear.
El escándalo fue eclipsado por posteriores polémicas que se tomaron la discusión nacional como la de Daniel Fuenzalida, Francisco Kaminski y Karol Lucero. Sin embargo, el gusto amargo de la farándula quedó en la boca de Ingrid, quien no estaba habituada a este tipo de atención.
El mal rato que pasó Ingrid Cruz
En el último capítulo de su podcast junto a Francisca García-Huidobro, “Di la verdad Rosa”, hablaron sobre el cahuín y el chisme, y discutieron cómo se siente ser el foco de comentarios. La ex Dama de hierro con su vasta trayectoria en farándula, aseguró que le resbala, mas no Ingrid.
La actriz recordó su último escándalo y la cantidad de comentarios que se dijeron sobre ella. “Es súper fuerte, te ves súper expuesta, yo me sentí súper permeable. Me di cuenta que estaba escuchando tanto... (pensé) ‘¿por qué dicen eso de mí si es mentira?’, tanto ruido que se me olvidó quién era yo“, comentó.
García-Huidobro le recordó que le aconsejó que no viera nada de farándula porque iban a estar hablando sobre ella. No siguió su consejo. “Te llamaba por teléfono y escuchaba las voces de todos los hueones de farándula”, dijo entre risas la animadora de Mega.
“Me pasaba que quería ver qué se iba a hablar de mí, si era verdad o no, pero después me di cuenta ‘¿qué sacaba?’. Cómo yo iba a entrar a pelear y decir ‘eso es mentira, eso es verdad’, ¿Voy a contar qué es mentira y qué es verdad? ¿Alguien me va a escuchar?"
“Fue súper fuerte darme cuenta que a la gente le gusta esto, y que le da lo mismo mentir. Además, hay gente que le gusta estar en la palestra y está dispuesta a cualquier cosa por dar una cuña, quieren estar en la polémica. Te das cuenta que mucha de esa gente está aburrida en su casa o no tienen un trabajo o ven esto como una forma de salir en la tele. Por lo menos, para mí no fue grato porque mi oficio es actuar”, cerró.