La modelo e influencer Julia Fernandes confesó el inusual acuerdo económico que mantiene con su expareja tras el quiebre amoroso: una “pensión de mascota” que él debería pagar completamente, mientras ella se hace cargo del cuidado diario de la perrita que compartieron durante cuatro años.
El asunto estalló después de que Fernandes revelara, en un video de PorCel TV, que la rutina del animal incluye servicios premium, como ir tres veces a la semana a un “colegio de mascotas”, un centro que ofrece actividades especiales, transporte en furgón y hasta piscina en verano. Y aún así, dejó claro que su ex debe cubrir todos los gastos.
Un acuerdo previo que salió a la luz tras la ruptura
Julia contó que la pareja tuvo una conversación cuando aún estaban juntos: si algún día terminaban, el perro sería responsabilidad económica de él. Ella no quería esa raza, pero su entonces pareja insistió en tenerla. Bajo esa lógica, hoy le parece justo que él asuma los costos.
Tras separarse, intentaron mantener custodia compartida, alternando semanas. Sin embargo, él no pudo sostener la rutina debido a su horario laboral. Eso llevó a una nueva dinámica: la perrita vive con Julia, pero él paga.
“Yo cuido completamente del perro y tú pagas todo”, aseguró. Según ella, ese es el acuerdo que ambos aceptaron.
El estilo de vida de la perrita: colegio, furgón y piscina
Lo que realmente sorprendió al público fue el nivel de cuidado que recibe la perrita.
Fernandes explicó que la mascota asiste a un colegio especial para perros tres veces por semana. A las 8:00 de la mañana pasa un furgón a buscarla junto a otros canes. El centro está ubicado en Chicureo y cuenta con piscina en verano, zonas de juegos y actividades de socialización.
“Yo lo amo y ella también; se vuelve loca”, dijo la modelo al describir la experiencia.
Este tipo de servicios, que incluyen transporte, cuidado diario, actividades guiadas y recreación acuática, elevan significativamente los costos mensuales. Por eso, la frase de Fernandes —“él tiene que pagar todo”— se convirtió en el eje del debate.
Redes divididas, pero con tendencia a apoyarla
Lejos de recibir rechazo masivo, la confesión generó una ola de comentarios que, en su mayoría, respaldan la postura de Julia. Muchos usuarios destacaron que mantener mascotas es costoso, especialmente cuando se les brinda un estilo de vida más completo.
“Estoy de acuerdo, porque se gasta mucho en mascotas”, “No es descabellado, ambos son responsables” o “Yo pago pensión: son $100,000 por dos perritos y una gata”, fueron algunas de las reacciones.

