Nuevos y reveladores antecedentes entregaron esta tarde en la Fiscalía ECOH respecto del asesinato de un hombre de 43 años en la comuna de Ñuñoa, quien fue ultimado este mediodía por un grupo de desconocidos en la intersección de calle Quirihue con José Domingo Cañas.
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Si bien es cierto que en las primeras indagatorias la identidad de la víctima aún era desconocida por los efectivos policiales, en el transcurso de esta jornada el persecutor judicial Sergio Soto, fiscal a cargo del crimen, expuso que se trataría de José Felipe Reyes Ossa, ciudadano de nacionalidad chilena de 43 años, quien además era un empresario en el barrio Meiggs.
Nuevos antecedentes del crimen
“Resultó lesionado por un grupo de personas que se movilizaban en un vehículo, a raíz de lo cual sufrió tres impactos balísticos, los cuales lamentablemente le causaron la muerte”, relató el fiscal, quien precisó que la víctima sólo mantenía antecedentes penales “por conducción en estado de ebriedad”.
Respecto de sus victimarios, Soto indicó en biobiochile.cl que del grupo de delincuentes que asaltaron al empresario y a su acompañante (que resultó ileso del ataque), al menos “dos de ellos serían de nacionalidad extranjera”.
Resultó lesionado por un grupo de personas que se movilizaban en un vehículo, a raíz de lo cual sufrió tres impactos balísticos, los cuales lamentablemente le causaron la muerte
— Sergio Soto
“La víctima que solamente fue objeto del delito de robo con intimidación fue sometida y reducida de inmediato por parte de estos antisociales”, puntualizó el persecutor, quien detalló que “la otra víctima no pudo seguir huyendo, ya que fue abordada por este grupo de sujetos, quienes en definitiva procedieron, al parecer en forma primera, a golpearlo con el arma en la cabeza y posteriormente dispararle en la dinámica de la ocurrencia de los hechos”.
Sobre el móvil tras el asalto a los dos sujetos, el fiscal indicó que “podemos señalar que dentro de los afectados, a uno de ellos solamente se le sustrajo su billetera y su teléfono celular, y respecto de la persona fallecida, ella mantiene sus pertenencias en su poder, incluso el dinero que portaba en ese momento”.
