El mundo del internet quedó impactado tras darse a conocer que la influencer Naya Fácil tiene una orden de detención en su contra, esto tras no asistir a declarar en Caldera.
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Los Carabineros la fueron a buscar a su domicilio para llevar a cabo el procedimiento, pero la personalidad no se encontraba en su hogar, por lo que hasta el día de hoy se encuentra -en parte- escondida de los uniformados.
Sin embargo, y a pesar de que no la ha pasado bien estos días, Naya sigue con la idea de ir a celebrar el Año Nuevo a las afueras de Santiago en compañía de amigos y su hermana. Por esta razón, decidió ir a tomar un trago para organizar sus planes para el 31 de diciembre.
“Chiquillos ya planificamos lo del Año Nuevo... Voy a ir por ahí y no les voy a decir dónde. Ojalá resulte todo bien; cruza los dedos Naya”, expresó de manera supersticiosa.
Aunque se topó con una no tan grata sorpresa mientras iba de camino a su domicilio, ya que estuvo cara a cara con los Carabineros. “Por poco no llego”, escribió asustada.
“Acabo de llegar a mi casa y me tope a los ‘poli’ frente a frente. Pasé por una calle y ellos pasaron al lado mío (...) me devuelvo por la misma calle y ellos volvieron por la misma vía”.
“Me vine soplada a mi casa.. Me hubiesen visto, estoy viviendo una teleserie”, contó entre risas y aseguró que le contará esta anécdota a sus nietos como la historia de la “Naya fugitiva”.
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Por otra parte, la influencer comentó que su auto no pasa desapercibido por ser de color rosado, y que este hecho le juega en contra porque todos la pueden reconocer fácilmente.
Finalmente, Naya Fácil solo pidió “pasar el Año Nuevo tranquila y en paz. Después que venga lo que sea”.