José Miguel Viñuela recibió a Martín Cárcamo en una nueva entrevista del programa De tú a tú de Canal 13. El exanimador de Mekano le entregó lo que él llamó su verdad sobre el episodio que ocurrió el 16 de julio de 2020. Esa mañana en Mucho Gusto, Viñueña le cortó la cola de caballo al camarógrafo José Miranda, en vivo y en directo.
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Casi once meses después, Viñuela volvió a tocar el episodio. Recordó que al día siguiente pidió disculpas solo arriba el escenario. Y que está arrepentido.
“Nunca de mi parte ha salido una sola palabra desde que pedí perdón en el matinal. Yo nunca he hablado, porque pedí perdón en dos oportunidades por el error que había cometido y porque hay un proceso judicial de por medio, del cual yo soy súper respetuoso. Obviamente lo que digan los tribunales uno lo va a acatar. Y la prensa de alguna manera incide en la opinión que la gente se pueda formar, sin haber contraparte”, dijo en lo que fue casi un monólogo.
Añadió luego: “Yo nunca he contado mi verdad”.
José Miguel Viñuela: su verdad
Y ahí relató que “desde el estallido social y la pandemia, el matinal sufrió cambios profundos. Después del estallido seguí en el programa, pero cuando vino el tema de la pandemia, la gran mayoría de los invitados eran políticos. Políticos, políticos, políticos. Y el programa empezó a tener un tono más político, más de prensa dura que el tono de entretención. El canal tomó la decisión de sacar a Lucho (Jara) y sacarme a mí para hacer un programa mucho más periodístico”.
Entonces, dijo que él se adaptó a ese formato: “Pasó el tiempo. Y de repente a mí me llaman. Yo empecé a hacer móviles para el programa. Hacía móviles desde el Hospital Van Buren. Viajaba a Valparaíso. Con familias que lo estuvieran pasando mal, etcétera. Todo bien. Pero mis apariciones eran un poco más esporádicas. Hasta que empezó a pasar el tiempo y Pablete, que era el productor ejecutivo, me dijo: ‘Jose, nos gustaría que llegarai el lunes a las 8.30 de la mañana, abras el programa y empecemos desde las 8.30 de la mañana un bloque para alivianar el programa, con humor. Hicimos 45 minutos de puro humor y nos fue increíble. Esto fue dos días antes de que ocurriera el episodio del pelo”, recordó.
Por qué en el matinal
Según él, el ambiente era el siguiente justo en la víspera del corte de pelo: “Dos días después me llamó para hacer lo mismo. Y empezamos a jugar. Sólo quiero decir que desde mi interior, mi concepto televisivo siempre ha sido entretener, alegrar, hacer reír. Cuando llevábamos media hora de juego en el estudio, a las 9.10 de la mañana, ocurrió el episodio del cual te voy a decir, hoy día, estoy súper arrepentido. Fue un error, una estupidez de mi parte”.
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Confesó que “termina el episodio del pelo, nos vamos a comerciales. Y en ese minuto sentí, no me digai qué fue. Una energía. Dije ‘hueón, la cagué, ¡la cagué!’. Nunca vi una reacción que me dijera ‘puta, no quiero que me cortí el pelo’. ‘Para, hueón’. Si es que me hablaron por el sono, honestamente puede haber sido y que no me hayan escuchado. Pero más allá de todo eso, yo la cagué”, le aseguró a Martín Cárcamo.
Luego José Miguel Viñuela dijo que “lo que no supe ver es, puta qué pena, que cinco minutos, la percepción que generó para afuera esto fue una percepción de imagen mía como si yo fuera un hueón que abuso de la gente o algo por el estilo. Mira, no quise ni ver lo que salió en redes sociales. Si tuviera que pedirle disculpas a José Miranda mil veces, se las pediría mil veces. Me pasé en banda, me hiperventilé, la cagué. Y lo digo abiertamente como lo dije ese día”.
José Miguel Viñuela insistió
Insistió en ese punto: “Pasé a llevar a una persona, sin querer. Creyendo que el juego que yo estaba haciendo lo iban a interpretar de la misma manera. Y no se interpretó de la misma manera. Él tiene el derecho a sentir que no se interpretó de la misma manera. Vuelvo a pedir las disculpas por ese error que cometí. Mi esencia televisiva siempre ha sido regalar alegría. Yo he trabajado 25 años en la tele. En mis 25 años había pasado por un momento tan difícil como el que pasé el año pasado”.
Más suelto, dijo: “Te quiero decir, compadre, que a raíz de este momento que viví tuve una sanción televisiva. Me sacaron más de seis meses del programa. Del aire. Me sacaron. Tuve una sanción económica, que nadie sabe, pero tuve una sanción económica del canal. Tuve de alguna manera que vivir con la Inspección del Trabajo. Contar lo que había vivido. Relatar mi historia con los ejecutivos del canal. Decirle a todo el mundo con quien me sentaba que estaba profundamente arrepentido, que esto fue un error, puta un infantilismo, una estupidez”.
Volvió de nuevo a que él no era así: “Quiero dejar en claro que yo jamás en mi vida, en mi vida, en mis 46 años, he vulnerado los derechos de alguien. Siempre me he preocupado de que la gente que trabaje conmigo esté bien”.
Sin interrupciones
Sin que Cárcamo lo interrumpiera, reiteró que “jamás voy a aceptar que de mí se diga que soy un abusador de poder, porque no lo tengo. Yo ya no estoy en el matinal. Hoy ya no estoy definitivamente en el matinal. Estoy haciendo la Hora de Jugar en la tarde. Pero no estoy en el matinal. No estoy porque el contexto social de Chile cambió. Y no estoy porque mi error me pasó la cuenta en el programa. Lo asumo como hombrecito”.
“Sí creo, compadre, que un error no define a las personas. Yo no puedo decir que por un error que cometí por cortarle el pelo a José Miranda, voy a decir que yo soy un conchadesumadre, que toda la vida he sido un hueón así, porque no lo soy”, insistió.
También dijo que “yo lo pasé mal con esto. Quiero que la gente sepa que no sólo hay una parte que la pasó mal. Insisto. La entiendo y pido las disculpas correspondientes. Pero yo estuve dos meses, compadre, con crisis de pánico. No podía salir a la calle. Una vez fui a una notaría, estaba haciendo una cola y me tuve que ir. Porque soy un hueón humano”, acabó.