Fue en marzo del 2024 cuando el abogado Aldo Duque advirtió que una pareja había sido descuartizada y asada en la comuna de Pudahuel. Hecho que habría ocurrido el 15 de septiembre del 2023, en plena semana de Fiestas Patrias.
”Después de matarlos los descuartizaron y sus restos los asaron en un parrilla que pusieron afuera de la casa e, incluso, invitaron a los vecinos a servirse y lo que no comieron se lo dieron a los perros”, publicó en aquella oportunidad, revelando lo que le comunicó una mujer que lo contactó buscando justicia.
Si bien en aquel momento, su denuncia no trascendió, ahora a más de un año del hecho, un reportaje de Canal 13 tomó contacto con la denunciante.
Se trata de la hija de Bernarda Morales, cuyos restos fueron encontrados el 8 de noviembre en la Ruta 68, junto a su pareja de nombre Arturo.
Cruel crimen en Pudahuel
Todo ocurrió cuando el principal imputado, Benjamín Bordillo Catrimán, quien arriesga presidio perpetuo, se tomó una casa en la comuna de Pudahuel y la utilizó para la venta de drogas.
“El Benja los tenía ahí, los tenía secuestrados y les pegaba… A Arturo lo degolló entero. A ella también, todo lo mismo”, denunció una fuente, mensaje que permitió encontrar los cadáveres.
Los cuerpos fueron desmembrados con serruchos y expuestos a electricidad y fuego. “Muchas partes fueron calcinadas”, contó la fiscal Bárbara Ramírez.
Además, la hija agregó que a su madre “la tuvieron enterrada en el antejardín de la casa, luego la desenterraron y la asaron a la parrilla (...) Varia gente sentía el mal olor, porque era carne descompuesta”, señaló.
“Hicieron como dos asados… uno era un pedazo de torso. Era carne de una persona”, agregó una vecina.
Actualmente, el caso fue cerrado por el Ministerio Público, solicitando cadena perpetua para el principal implicado y su pareja. Su sobrina, en tanto, arriesga hasta 10 años de internación provisoria, puesto que era menor de edad.
Los imputados enfrentan cargos por secuestro con homicidio, en lo que sería el primer caso de canibalismo en el país.