La iniciativa legal fue presentada por los diputados Rubén Oyarzo, Camila Musante y Jaime Araya y busca evitar que los extranjeros puedan votar en las elecciones presidenciales, limitando ese derecho solo para comicios de orden local, como los municipales y regionales.
El diputado del Partido Radical, Rubén Oyarzo, sostuvo que esta reforma constitucional “resguarda la soberanía de nuestro país y tenemos que sacarlo adelante porque no puede ser que hoy día, con una migración descontrolada que tenemos en el país, con una problemática en el continente como es Venezuela, en la cual la mayoría de los migrantes que están llegando están llegando de forma irregular, de forma descontrolada, puedan votar para la presidencia”.
En ese sentido, agregó que “es importante limitar el voto extranjero, ya que hoy día el padrón podría llegar a más de un millón de personas que pueden votar sin un arraigo en nuestro país en las presidenciales”.
La diputada independiente, Camila Musante, en tanto, subrayó que esta iniciativa pone fin al “cucutazo electoral”.
La parlamentaria sostuvo: “¿Queremos que sea el Tren de Aragua quien elija el próximo presidente de nuestro país? Porque cerca de un millón de extranjeros podrían tomar la decisión de quien liderará Chile durante los próximos cuatro años y creemos que eso no puede ser así”.
Musante agregó que si los extranjeros quieren incidir en una votación tan importante como son la presidencial y el Congreso Nacional, deberán tener la nacionalidad chilena.
Jaime Araya, por su parte, sostuvo que “esta reforma constitucional lo que busca es proteger la integridad de nuestra democracia. En ninguna parte del mundo, salvo cinco países, los extranjeros definen quién es Presidente de la República”.
Asimismo, emplazó a los candidatos de la derecha Evelyn Matthei, José Antonio Kast y Johannes Kaiser, a transparentar su posición sobre el voto de extranjeros en las presidenciales.
“Tanto dicen ser republicanos, querer al país; tanto se visten de patriotas, pero en el Senado a escondidas le quieren dar el voto nada menos que a casi un millón de extranjeros. Incluso podría producirse el absurdo que miembros del Tren de Aragua podrían votar en nuestra elección para elegir al Presidente de la República. Eso no es normal”, expresó Araya.