Un plazo de investigación de 90 días determinó el tribunal de garantía para que la Fiscalía lleve adelante la indagatoria en torno a un doble homicidio consumado en la comuna de Colina, en medio de un partido de fútbol amateur que se jugó la tarde del domingo 13 de julio en la cancha San Martín, ubicada en la caletera de la autopista Los Libertadores.
Según los primeros antecedentes, los hechos se habrían generado cuando en medio del partido un hombre sacó un arma de fuego y disparó al aire, lo que habría llevado a la intervención de un funcionario del Ejército que estaba en el lugar, identificado como Marcelo Eguía Martínez, quien resultó muerto tras ser atacado con disparos por el sujeto.
Posteriormente, según la Fiscalía, un adolescente de 17 años, hijo del militar, habría tomado el arma de su padre para disparar a su agresor, Ignacio del Canto, quien también terminó muerto.
Defensa de adolescente alega inocencia
Durante la audiencia de control de la detención, la Fiscalía formalizó al joven de 17 años por el delito de homicidio y el tribunal decidió dejarlo con arresto domiciliario nocturno.
Sin embargo, la defensa del adolescente alegó que habría sido el mismo militar quien habría percutado el disparo que le ocasionó la muerte a su agresor, descartando participación del joven.
El abogado Carlos Palacios afirmó que la Fiscalía no tiene las pruebas suficientes para acusar al joven de haber realizado el disparo que mató al atacante de su padre. “La línea argumental básicamente consistió en que no estaba establecido a esta fecha que mi representado haya sido el autor del disparo que le ocasionó la muerte al señor Del Canto, que es el agresor”.
Según la defensa, la muerte del agresor ocurrió “en un contexto de forcejeo con el padre de mi representado en el suelo”, agregando que “hay un único testigo, que es el entrenador del equipo de fútbol, que refiere que habría visto a mi representado disparar, no hay ningún otro”.
El abogado aseguró que “la dinámica de los hechos, referida por todos los testigos, y unido al informe de análisis del suceso por parte de la Brigada de Homicidios de la PDI, que dan cuenta de una lesión única en la víctima, con un orificio de bala de entrada en la zona frontal abdominal y salida en un glúteo, da cuenta efectivamente de la tesis de la defensa en orden a que el disparo habría sido ocasionado por el padre y no por mi representado”.
